La Navidad representa la época del año en la que celebramos junto a nuestros seres queridos los logros alcanzados y damos la bienvenida a un nuevo año repleto de desafíos que nos permiten crecer como individuos. Estas festividades rebosantes de alegría están arraigadas en las tradiciones cristianas que conmemoran el nacimiento de Jesús.
En la historia de la humanidad, Jesús de Nazareno y dos culturas en particular han dejado una huella indeleble en las costumbres navideñas que prevalecen en Occidente. Los romanos, a partir del siglo IV, transformaron festividades paganas vinculadas a Saturno en celebraciones cristianas.
Son muchos los aportes de las diferentes culturas a estas festividades, y además de los romanos, se destacan los estadounidenses que transformaron las historias de Nicolás de Bari en el concepto de San Nicolás o Papá Noel que conocemos hoy, como expliqué con más detalle en mi artículo publicado en 2020 titulado "Una historia de Navidad".
Otro personaje que nos ofrece la cultura estadounidense y que asume un papel cada vez más protagonista en la Navidad es el Grinch, el embajador de la anti-Navidad. Este personaje, junto a Jesús y Papá Noel, se ha convertido en un ícono de estas festividades, guste o no. Ante lo expuesto, me siento motivado a compartirles el origen de este pintoresco personaje, el cual nos brinda algunas lecciones de vida que deberían captar nuestra atención.
Le debemos al afamado escritor estadounidense Dr. Seuss (Theodor Seuss Geisel) la creación del Grinch. En 1957, publicó su libro infantil '¡Cómo El Grinch robó la Navidad!', el cual fue un éxito tal que en 1966 MGM Animation produjo un especial de televisión con el mismo título, dirigido por el caricaturista, productor y director estadounidense Chuck Jones. La historia llegó al cine en el año 2000, con la interpretación del actor canadiense Jim Carrey, respaldada en taquilla por los fanáticos.
Pero, ¿quién es el Grinch? El Grinch es un duende de algo más de 50 años, de color verdoso y peludo, que ha ganado un lugar peculiar como símbolo navideño. Más que celebrar la festividad, se erige como una sátira del consumismo desbordante y la obsesión egoísta en torno a ella. Este personaje refleja el predominio del materialismo, la falta de empatía y el enfoque exclusivo en uno mismo. Aunque inicialmente se aparta por completo del mundo de las personas, su corazón experimenta una transformación, dejando atrás su odio para convertirse sorprendentemente en un ícono navideño.
Esta es una explicación simplificada acerca de quién es el Grinch y de su origen. Les invito a leer el libro "¡Cómo El Grinch robó la Navidad!" del afamado Dr. Seuss o a ver la película protagonizada por Jim Carrey con el mismo título."
Todos conocemos a alguien cercano que actúa como un Grinch al principio, pero termina disfrutando de las festividades incluso más que nosotros. Compartan este artículo con ese amigo o familiar 'Grinch', para que desde ya propicien su transformación.
¡Les deseo felices fiestas y un próspero año nuevo!